1. El Señor se dirigió a Moisés y Aarón, y les dijo:
2. “Decidles esto a los israelitas: Cuando un hombre sufra de flujo de su miembro, ese flujo será impuro.
3. La impureza del hombre debida al flujo existirá tanto si su miembro deja correr el semen como si queda obstruido a causa del mismo. De todos modos es impuro.