23. Aquel día habrá un camino ancho desde Egipto hasta Asiria. Los asirios podrán llegar hasta Egipto y los egipcios hasta Asiria, y los egipcios y los asirios adorarán juntos al Señor.
24. Aquel día Israel se colocará a la par con Egipto y Asiria, y será una bendición en medio de la tierra.
25. El Señor todopoderoso los bendecirá, diciendo: “Yo bendigo a Egipto, mi pueblo, a Asiria, obra de mis manos, y a Israel, mi propiedad.”