2. Manteneos constantes en la oración, siempre alerta y dando gracias a Dios.
3. Orad también por nosotros, a fin de que el Señor nos abra una puerta para predicar el mensaje y anunciar el designio secreto de Cristo, por lo cual estoy preso.
4. Orad para que yo lo dé a conocer tan claramente como debo hacerlo.