20. ¡Alégrate, cielo,por causa de esa ciudad!¡Y alegraos vosotros,los que sois del pueblo santo,y los apóstoles y los profetas,porque Dios, al condenarla,os ha hecho justicia!”
21. Un ángel poderoso levantó entonces una piedra, que era como una gran piedra de molino, la lanzó al mar y dijo:“Así, con violencia, serás derribada,Babilonia, la gran ciudad,y nunca más volverán a verte.
22. Nunca más se oirá en tus callesmúsica de arpas, flautas y trompetas,ni habrá en ti artesanosde ningún oficio,ni se oirá en ti el ruidode la piedra del molino.