8. Ahora bien, si quieres reforzar tu ejército con ayuda de ellos para ir a la guerra, Dios te hará caer frente al enemigo, porque Dios tiene poder para ayudar y para derribar.
9. Amasías preguntó al hombre de Dios:–Pero, ¿qué va a pasar entonces con los tres mil trescientos kilos de plata que di a las tropas de Israel?El hombre de Dios le respondió:–El Señor tiene suficiente para darte mucho más que eso.
10. Entonces Amasías hizo que las tropas que habían venido de Efraín a unírsele se separasen y volvieran a sus casas. Pero ellos se enfurecieron contra Judá, y se volvieron a sus casas llenos de ira.
11. Amasías se armó de valor y llevó su ejército al valle de la Sal, y mató a diez mil hombres de Seír.
12. Además los de Judá apresaron vivos a otros diez mil y los llevaron a la cumbre de un monte rocoso; desde allí los despeñaron, y todos quedaron destrozados.