19. ¡No cabe duda de que tenéis que dividiros en partidos para que se sepa quiénes son los verdaderos cristianos!
20. El resultado de esas divisiones es que la cena que tomáis en vuestras reuniones no es ya realmente la Cena del Señor.
21. Porque a la hora de comer, cada uno se adelanta a tomar su propia cena; y mientras unos se quedan con hambre, otros hasta se emborrachan.
22. ¿No tenéis casas donde comer y beber? ¡Por qué menospreciáis la iglesia de Dios y avergonzáis a los que no tienen nada? ¿Qué voy a deciros? ¿Podré acaso felicitaros? ¡En esto no os felicito!