26. Entonces Pilato puso en libertad a Barrabás; luego mandó azotar a Jesús y lo entregó para que lo crucificaran.
27. Los soldados del gobernador llevaron a Jesús al palacio, y reunieron toda la tropa a su alrededor.
28. Le quitaron la ropa, le vistieron con una capa roja
29. y le pusieron en la cabeza una corona hecha de espinas y una vara en la mano derecha. Luego, arrodillándose delante de él y burlándose, le decían:–¡Viva el Rey de los judíos!