Lucas 4:33-44 Dios Habla Hoy con Deuterocanónicos Versión Española (DHHED)

33. En la sinagoga había un hombre que tenía un demonio o espíritu impuro que gritaba con fuerza:

34. –¡Déjanos! ¿Por qué te metes con nosotros, Jesús de Nazaret? ¿Has venido a destruirnos? Yo te conozco: ¡Sé que eres el Santo de Dios!

35. Jesús reprendió a aquel demonio diciéndole:–¡Cállate y deja a ese hombre!Entonces el demonio arrojó al hombre al suelo delante de todos y salió de él sin hacerle ningún daño.

36. Todos se asustaron y se decían unos a otros:–¿Qué palabras son esas? ¡Este hombre da órdenes con plena autoridad y poder a los espíritus impuros y los hace salir!

37. La fama de Jesús se extendía por todos los lugares de la región.

38. Jesús salió de la sinagoga y entró en casa de Simón. La suegra de Simón estaba enferma, con mucha fiebre, y rogaron a Jesús que la sanase.

39. Jesús se inclinó sobre ella y reprendió a la fiebre, y la fiebre la dejó. Al momento, ella se levantó y se puso a atenderlos.

40. Al ponerse el sol, todos los que tenían enfermos de diferentes enfermedades los llevaron a Jesús; él puso las manos sobre cada uno de ellos y los sanó.

41. De muchos enfermos salieron también demonios que gritaban:–¡Tú eres el Hijo de Dios!Pero Jesús reprendía a los demonios y no los dejaba hablar, porque sabían que él era el Mesías.

42. Al amanecer, Jesús salió de la ciudad y se dirigió a un lugar apartado. Pero la gente le buscó hasta encontrarle. Querían retenerlo para que no se marchase,

43. pero Jesús les dijo:–También tengo que anunciar las buenas noticias del reino de Dios a los otros pueblos, porque para esto he sido enviado.

44. Así iba Jesús anunciando el mensaje en las sinagogas de Judea.

Lucas 4