1. Todavía estaba preso Jeremías en el patio de la guardia, cuando el Señor se dirigió a él de nuevo y le dijo:
2. “Yo, el Señor, que hice la tierra, la formé y la coloqué firmemente en su sitio, te digo:
3. Llámame y te responderé, y te anunciaré cosas grandes y misteriosas que tú ignoras.