Jeremías 25:13-30 Dios Habla Hoy con Deuterocanónicos Versión Española (DHHED)

13. Haré caer sobre ese país todo lo que he anunciado y está escrito en este libro: todo lo que Jeremías ha dicho en mi nombre contra todas las naciones.

14. Grandes naciones y reyes poderosos los someterán también a ellos. Así les daré el pago que merecen sus acciones.’ ”

15. El Señor, el Dios de Israel, me dijo: “Mira esta copa llena del vino de mi ira. Tómala y dásela a beber a todas las naciones a las que yo te envíe.

16. Cuando beban de ella, comenzarán a vomitar y se pondrán como locos a causa de la guerra que les voy a enviar.”

17. Yo tomé la copa de la mano del Señor y se la di a beber a todas las naciones a las que el Señor me envió.

18. Se la di a beber a Jerusalén y a las ciudades de Judá, junto con sus reyes y jefes, para destruirlas y dejarlas convertidas en ruinas, en algo que causara terror y espanto, en el ejemplo de maldición que todavía hoy siguen siendo.

19. Igualmente se la di a beber al faraón, rey de Egipto, a sus funcionarios y jefes, a todo su pueblo

20. y a la gente de diversas razas que hay allí; a todos los reyes del país de Us y de la región de los filisteos: Ascalón, Gaza, Ecrón y lo que queda de Asdod;

21. a Edom, Moab y Amón;

22. a todos los reyes de Tiro y de Sidón; a todos los reyes de los países del mar Mediterráneo;

23. a las tribus de Dedán, Temá y Buz, y a los pueblos que se afeitan las sienes;

24. a todos los reyes de Arabia; a todos los reyes de las diversas razas que viven en el desierto;

25. a todos los reyes de Zimrí, Elam y Media:

26. a todos los reyes del norte, cercanos o lejanos unos de otros. Es decir, a todos los reinos de la tierra. Por último, la beberá el rey de Babilonia.

27. Luego me dijo el Señor: “Diles que yo, el Señor todopoderoso, el Dios de Israel, les ordeno que beban hasta que se emborrachen y vomiten y caigan al suelo para no levantarse, por causa de la guerra que les voy a enviar.

28. Y si no quieren recibir de ti la copa y beberla, diles: ‘El Señor todopoderoso dice: Tendréis que beberla de todos modos.

29. Pues comenzaré a enviar mis castigos sobre la ciudad que me está consagrada. ¿Y creéis que vais a quedar sin castigo? Pues no quedaréis sin él, porque voy a enviar la guerra a todos los habitantes de la tierra. Yo, el Señor todopoderoso, lo afirmo.’

30. “Tú, Jeremías, anúnciales en mi nombre todas esas cosas. Diles:‘El Señor lanza su voz de truenodesde lo alto, desde el santo lugar donde vive.Pues contra su rebañogrita como los que pisan las uvas:contra todos los habitantes de la tierra.

Jeremías 25