7. Los que viajaban con Saulo estaban muy asustados, porque habían oído la voz pero no habían visto a nadie.
8. Luego Saulo se levantó del suelo, pero cuando abrió los ojos no podía ver. Así que le cogieron de la mano y le llevaron a Damasco,
9. donde estuvo tres días sin ver y sin comer ni beber.
10. En Damasco vivía un creyente llamado Ananías, a quien el Señor se presentó en una visión y le dijo: “¡Ananías!” Él contestó: “Aquí estoy, Señor.”