33. Pero Samuel le dijo:–Con tu espada dejaste sin hijos a muchas mujeres. Pues igual que ellas quedará tu madre.Y sin más, Samuel lo descuartizó en Guilgal, ante el Señor.
34. Después se fue a Ramá, y Saúl regresó a su casa, en Guibeá de Saúl.
35. Y Samuel nunca más volvió a ver a Saúl, aunque le causó mucha tristeza que el Señor se hubiera arrepentido de haber hecho a Saúl rey de Israel.