2. Damos siempre gracias a Dios por todos vosotros, haciendo memoria de vosotros en nuestras oraciones;
3. sin cesar acordándonos de la obra de vuestra fe, y del trabajo y caridad, y del esperar con la esperanza del Señor nuestro, Jesús el Cristo, delante del Dios y Padre nuestro.
4. Estando ciertos, hermanos amados, de que sois escogidos de Dios.
5. Por cuanto nuestro Evangelio no fue entre vosotros en palabra solamente, mas también en potencia, y en el Espíritu Santo, y en gran plenitud; como sabéis cuáles fuimos entre vosotros por causa de vosotros.