9. ¿Quién me llevará a la ciudad fortalecida? ¿Quién me llevará hasta Idumea?
10. Ciertamente, tú, oh Dios, que nos habías desechado; y tú, oh Dios, que no salías con nuestras armadas.
11. Danos socorro contra el enemigo, que vana es la salvación de los hombres.
12. En Dios haremos ejército; y él hollará nuestros enemigos.